El observatorio meteorológico de Igeldo fue creado en 1905 por el sacerdote Juan Miguel Orcolaga. En su más de un siglo de existencia se han realizado muy variadas actividades de observación, potenciadas especialmente por D. Juan Ignacio Álvarez Usabiaga y Dª Margarita Martín Giménez, últimos representantes del INM/Aemet en la Comunidad Autónoma Vasca.
En este centro, reconocido como el único centenario con observaciones marítimas y terrestres en España por la Organización Meteorológica Mundial, se han recogido datos fundamentales para conocer la evolución del clima en un lugar representativo de la costa de Gipuzkoa. Históricamente, fueron observadores meteorológicos quienes llevaban a cabo esta función con la ayuda de instrumental convencional. Desde los años 80 del siglo XX, se cuenta también con estaciones meteorológicas automáticas, de manera que en la actualidad conviven estos dos tipos de observaciones: las realizadas por profesionales y las llevadas a cabo automáticamente.
Dentro del proceso de digitalización emprendido por Aemet en consonancia con sus homólogos europeos, las observaciones nocturnas en Igeldo han pasado a realizarse en exclusiva por estaciones meteorológicas automáticas, una vez que se han asegurado los planes de mantenimiento y control de calidad. Además, durante un tiempo, se han tomado medidas en paralelo, para asegurar la continuidad de la serie. Los estudios realizados previamente han mostrado una gran exactitud entre las medidas convencionales y las automáticas, lo que garantiza que la calidad y longitud de la serie climatológica de Igeldo está garantizada según estándares internacionales. Asimismo, la observación marítima se garantiza a través del instrumental instalado en boyas.
La infraestructura y el terreno disponible en el Observatorio, además, proporciona un marco ideal para la toma de datos por estaciones meteorológicas automáticas de diferentes organismos. Así, con la estación automática de Aemet y los sensores de radiación que también hay instalados, coexisten una estación automática de la Diputación de Gipuzkoa, sensores de calidad del aire de la Universidad del País Vasco y unos sensores especializados del Consejo Superior de Energía Atómica. Por lo tanto, Igeldo se convierte en un gran laboratorio de intercomparación de datos.
El futuro inmediato del observatorio pasa por su potenciación en base a los nuevos requerimientos de la sociedad en materia de tiempo y clima. La Administración General del Estado y el Gobierno Vasco están trabajando en la constitución de una entidad para gestión conjunta del Observatorio.
Se aunarán esfuerzos entre distintas administraciones para reforzar actividades tales como la elaboración de estudios climatológicos, especialmente importantes por la longitud de la serie de datos; mejora de las observaciones meteorológicas e intercomparación de resultados; potenciación de la divulgación y concienciación sobre meteorología y cambio climático a través de visitas al observatorio y elaboración de materiales; y, finalmente, refuerzo de la institucionalidad del centro con un desarrollo de la colaboración entre instituciones para dar un mejor servicio a la sociedad.