Agencia Estatal de Meteorología
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18/09/2012 El día 17 de septiembre a las 18:28 hora europea, fue lanzado con éxito el satélite METOP-B desde el cosmódromo de Baikonur (Kazajstán) con un lanzador Suyuz 2.1a.
El cometido de METOP-B es asegurar la continuidad de las observaciones desde una órbita polar, a unos 900 km de la superficie terrestre. Estas observaciones son fundamentales para la predicción del tiempo con modelos numéricos, la base de la moderna predicción meteorológica, así como para el control medioambiental y del clima. Actualmente, estas funciones se realizan exclusivamente por el primer satélite de la serie, el METOP-A, lanzado el 16 de octubre de 2006, que ha superado su vida útil nominal.
El valor de los datos de METOP para la predicción meteorológica se ha comprobado en estudios recientes sobre el impacto de las distintas fuentes de datos (observaciones en superficie, desde aviones y desde el espacio) en la precisión de las predicciones a 24 horas de plazo, en la que los datos del METOP-A representan la mayor contribución, con alrededor del 25%. Limitándose a la contribución de datos de satélites individuales, la del METOP-A es de cerca del 40%, que casi dobla la contribución de los satélites de órbita polar de la anterior generación.
Los satélites METOP de órbita polar, junto con los satélites geostacionarios METEOSAT, suponen los dos pilares del sistema europeo de satélites de observación meteorológica, operados por el organismo europeo de satélites meteorológicos EUMETSAT, a cuyo presupuesto contribuye España en alrededor del 8% a través de la Agencia Estatal de Meteorología.
El 20 de septiembre, EUMETSAT tomará el control del METOP-B y comenzará un periodo de pruebas de seis semanas, durante el que comenzará la transmisión directa de datos y se producirá en paralelo la calibración y validación de los productos generados por cada instrumento del satélite. El producto final se espera que esté listo en unas 28 semanas después del lanzamiento, tras las cuales METOP-B relevará a METOP-A como satélite principal para la generación de servicios en tiempo casi real y para la adquisición de datos antárticos. Se espera que las operaciones rutinarias comiencen unos nueve meses después del lanzamiento.
