Aline fue la primera gran borrasca de la temporada 2023-2024. Fue nombrada por el Instituto Portugués del Mar y de la Atmósfera (IPMA) el 17 de octubre a las 13 UTC. El aviso alertaba principalmente de intensas precipitaciones, fuerte viento y mal estado de la mar sobre Portugal a partir de las 9 UTC del día 19 de octubre. En nuestro país la borrasca causó importantes precipitaciones y rachas de viento, así como mal estado de la mar. Destacaron especialmente las precipitaciones registradas en la ciudad de Madrid, batiéndose en el observatorio de El Retiro (Madrid) el valor de precipitación acumulado en 24 horas más alto de toda su serie centenaria.
Avisos, observaciones e impactos
La borrasca provocó la emisión de numerosos avisos, muy generalizados por todo el territorio el día 19, y más restringidos el sábado al litoral norte y a la vertiente mediterránea y a Baleares. El día 19 los avisos emitidos de mayor nivel fueron naranjas como consecuencia de la previsión de precipitaciones que dejarían acumulados importantes en 12 horas, especialmente en puntos del centro, suroeste peninsular y en el Pirineo central. También se emitieron avisos de nivel naranja por viento, extendiéndose éstos a zonas de la fachada mediterránea y de Baleares, con avisos que indicaban valores superiores a los 90 km/h de componente SW-W. Por otro lado, también se emitieron numerosos avisos costeros para Galicia, donde se prevían olas de entre 5 y 8 m por mar combinada de NW. Los avisos costeros afectaron también a todo el litoral atlántico andaluz, y desde
Almería hasta el cabo de la Nao y todo el mar Balear, donde se esperaba viento de SW y olas de 3 a 5 m. En las estaciones de AEMET se observaron valores extraordinarios de viento, así, en Cerler/Cogulla (Huesca) se registró un viento máximo de 167 km/h, observándose numerosos puntos con valores por encima de los 100 km/h, principalmente de zonas altas. No obstante en zonas más bajas, como en el aeropuerto de Málaga o en la ciudad de Jaén, también se observaron rachas de viento por encima de los 90 km/h. En cuanto a las precipitaciones registradas, destacaron los 134 mm en la estación de esquí de La Covatilla (Salamanca), observándose valores también por encima de los 100 mm en otros puntos del Sistema Central, principalmente de la provincia de Cáceres. En cuanto a las precipitaciones en núcleos de mayor población, destacaron las que se produjeron sobre la capital de
España, registrándose en el observatorio de El Retiro 114 mm, que supone el valor más alto en 24 horas de toda su serie histórica.
El viernes 20 los avisos más significativos se emitieron por mal estado de la mar en gran parte del litoral cantábrico, donde se activaron avisos de nivel rojo debido al intenso viento del W de fuerza 9 y olas de entre 8 y 9 m. También se emitieron avisos costeros de nivel naranja en todo el litoral gallego y en la provincia de Almería. El resto de los avisos emitidos para este día fueron por viento, todos ellos de nivel amarillo en numerosas comarcas del interior norte y este peninsular, así como en Baleares. Durante este día, el viento máximo observado se registró en la estación de Estaca de Bares (A Coruña) donde se observó un valor de 156 km/h, destacando los 100 km/h medidos en la ciudad de Santander. En cuanto a las precipitaciones, las más importantes se produjeron en el norte peninsular, destacando los 96 mm registrados en As Pontes (A Coruña).
Los impactos provocados por la borrasca Aline fueron muy numerosos, destacando los que se produjeron en la ciudad de Madrid y en toda su área metropolitana, donde hubo numerosas actuaciones por parte de los servicios de emergencia. La gran acumulación de agua provocó problemas en varios tramos de las líneas 1, 2, 5 y 7 del metro, así como de varias líneas de trenes y demoras. Las autovías presentaron complicaciones circulatorias tanto en los accesos como en las salidas de la capital en ambos sentidos. El fuerte viento y los notables acumulados provocaron además el cierre de un buen número de parques de la ciudad, entre ellos el de El Retiro.