Agencia Estatal de Meteorología
- El tiempoEl tiempo
- Servicios climáticosServicios climáticos
- ConócenosConócenos
- I+D+iI+D+i
- Conocer másConocer más
- Empleo público y becasEmpleo público y becas
- Datos abiertosDatos abiertos
- Sede electrónica
Olivia fue la décimo quinta borrasca de la temporada 2023-2024. La nombró el IPMA (Instituto portugués del Mar y de la Atmósfera) el 2 de abril a las 10:00 UTC. En el aviso de su nombramiento se indicaba que la borrasca generaría rachas de viento muy intensas y también fuertes precipitaciones y mal estado de la mar, principalmente en el archipiélago de las Azores. Apenas tuvo afectación sobre nuestro país, excepto sobre el litoral norte gallego y zonas altas del interior noroeste peninsular.
Evolución de la borrasca
Olivia se profundizó en el seno de una amplia vaguada con eje situado sobre el centro del Atlántico. El día 3 a las 12 UTC la borrasca empezó a intesificarse al oeste de las Azores (40º N, 35º W). En las siguientes 24 horas se desplazó hacia el nordeste muy rápidamente a la vez que se profundizaba hasta alcanzar su mínimo barométrico de 976 hPa en la posición 52º N y 20º W, lejos de la Península. Desde esta posición Olivia siguió avanzando las siguientes 36 horas, perdiendo intensidad, y adquiriendo un desplazamiento hacia el norte, situándose a las 12 UTC del día 5 al oeste de Irlanda. Durante la segunda mitad del día 5 la borrasca terminó por desaparecer.
Avisos emitidos y principales observaciones
La trayectoria que siguió la borrasca a lo largo de todo su ciclo de vida estuvo muy alejada de la Península, por lo que sus efectos apenas se sintieron en nuestro territorio. Sólo las comunidades del noroeste peninsular y especialmente Galicia, fueron las más afectadas. Sus efectos se sintieron el día 4 y primeras horas del día 5, cuando se emitieron avisos de nivel amarillo de tipo costeros en el litoral de la provincia de A Coruña, así como por rachas de viento en otras comarcas del litoral de la comunidad gallega, donde se mantuvieron el día 5, elevándose a nivel naranja en A Coruña.
Además de mal estado de la mar, la borrasca provocó intensas rachas de viento en puntos de Galicia, como en Chandrexa de Queixa (Ourense) y zonas altas de Asturias, como en Cabrales donde se alcanzaron los 106 km/h durante la noche del día 4. También durante la madrugada del 5, hubo rachas muy intensas en otros puntos de Asturias como en el Puerto de Leitariegos, donde se registró el máximo del episodio con 107 km/h. El resto de rachas observadas durante la tarde y noche del 5 se debieron a la influencia de una nueva borrasca nombrada como Kathleen por el servicio meteorológico Irlandés, la cuál provocaría un intenso episodio de calima sobre gran parte de la Península durante los siguientes tres días.
