Agencia Estatal de Meteorología

Formación y evolución posterior de la borrasca

La borrasca Fabien se formó dentro del mismo flujo zonal muy intenso y húmedo que atravesaba todo el Atlántico (un "río atmosférico") y que unos días antes había dado lugar a la formación de Elsa. Hacia las 18 UTC del día 19 se observa una pequeña baja al sur de Terranova, con algo menos de 996 hPa en su centro. Al cabo de 24 horas, a las 18 UTC del día 20, su centro se situaba en medio del Atlántico Norte, hacia 45ºN-35ºW, con una profundidad inferior a 970 hPa, por lo que experimentó una ciclogénesis explosiva. A partir de ese momento, y sin profundizarse más, se desplazó rápidamente en dirección a Europa, llevada por el "río atmosférico", con su centro siempre en torno a 45-50ºN, un poco al norte de la Península. A últimas horas del día 21 el centro llegó a Bretaña y, a lo largo del día 22 Fabien se deshizo entre los Países Bajos y Dinamarca.

Avisos emitidos

Se emitieron avisos por  rachas de viento de nivel rojo (umbral de 140 km/h) en el norte de Coruña y Lugo y en la parte suroccidental de la cordillera Cantábrica de Asturias para el día 21 por la tarde, y de nivel naranja en el resto de Galicia, Asturias, casi toda Castilla y León, sistema Central y zonas montañosas de Castilla-La Mancha y Andalucía oriental (valores entre 90 y 120 km/h, según zonas), entre el 21 por la tarde y primera mitad del día 22.

Respecto a los  fenómenos costeros, se emitieron  avisos de nivel rojo en el Cantábrico y litoral atlántico de Galicia, por viento del W al SW de fuerza 8 a 9, localmente 10, y mar combinada de hasta 8 a 9 metros. En gran parte del resto de las zonas costeras de la Península y en Baleares se emitieron avisos costeros de nivel naranja.

Finalmente, y aunque las precipitaciones no fueron lo más destacado en este episodio, se emitieron avisos de nivel naranja por precipitación acumulada en 12 horas superior a 80 mm en las zonas montañosas de la provincia de Albacete.

Principales impactos en España

Los efectos más destacados de la borrasca Fabien se debieron al intenso oleaje que afectó a Galicia y Cantábrico y a las rachas de viento muy fuertes, incluso huracanadas, que afectaron a una gran parte de la Península, sobre todo al noroeste, y a Baleares. A diferencia de lo ocurrido con Elsa, no se registraron víctimas mortales que se puedan asociar al paso de Fabien, si bien los daños materiales fueron considerables en las zonas afectadas.