El
principal instrumento del Meteosat es un radiómetro de barrido,
que facilita los datos en forma de radiancias visibles (VIS), infrarrojo
(IR) y vapor de agua (WV), produciendo imágenes del disco terrestre
tal como se ve desde la orbita geoestacionaria. La radiación terrestre
recogida (en el visible y en los dos canales infrarrojos) es transformada
en señales eléctricas analógicas por cinco detectores,
dos para el visible y tres para el infrarrojo.
Los dos detectores del visible
están en el plano focal del telescopio. Su campo de visión
instantáneo de la superficie es de 2.5 km* 2.5 km en el punto subsatélite
y viene determinado por su tamaño y por la distancia focal.
Los detectores infrarrojos tienen un campo de visión instantanea
de 5 km*5 km.
El satélite rota sobre
su eje y, en cada rotación (600 milisegundos) el telescopio barre
una nueva línea de imagen, situada 5 km al norte de la anteriormente
barrida. El telescopio explora un angulo de 18 grados en la
dirección norte-sur
ralizando en 25 minutos una exploración completa de la Tierra con
2500 líneas de barrido. Al terminar la exploración vuelve
a su posición inicial en 2.5 minutos. A continuación hay
un periodo de estabilización de otros 2.5 minutos, que sirve para
amortiguar la nutación antes del comienzo de la siguiente exploración.
Las imágenes se generan de este a oeste por el efecto de rotación
y de sur a norte por el mecanismo de orientación del satélite. |