Los huracanes comienzan como tormentas tropicales que se originan generalmente entre 5 ª y 20ª de latitud al norte y al sur del ecuador. Se originan en el mar y se mueven lentamente hacia el oeste. Posteriormente suelen curvarse parabólicamente, alejandose del ecuador, para adentrase mas tarde en el flujo de latitudes medias rodeando los anticiclones oceánicos subtropicales, aunque hay que señalar que también pueden tener trayectorias irregulares. En el hemisferio norte alcanzan su máxima frecuencia entre agosto y septiembre y en el hemisferio sur entre enero y febrero.
En esta imagen el huracan
se ha formado frente a las costas del oeste de Africa y se deplaza hacia
America central (marcado con la letra A). Comúnmente aparecen en
forma de coma formada por combinaciones de líneas nubosas convectivas
y cirros. A medida que el huracan se intensifica, la configuración
en coma se hace casi circular y en algunas ocasiones, como en este caso,
se puede ver un area oscura ("ojo") en el centro rodeado por un anillo
brillante de nubosidad convectiva o de un denso manto de cirros. El "ojo"
de los huracanes más intensos es en general redondo e inconfundible
(como en este caso) y otras veces puede aparecer enmascarado por la banda
de cirros que atraviesa el centro.