En este apartado
se presenta y analiza la situación sinóptica general en
la que ocurrió el fenómeno de las lluvias torrenciales del
31 de marzo de 2002 en Santa Cruz de Tenerife. Se pondrá especial
énfasis en los aspectos sinópticos que pudieron estar relacionados
con el establecimiento de un entorno favorable para el disparo, mantenimiento
y disipación de los fenómenos tormentosos.
Las Islas Canarias habían estado, los días anteriores,
bajo la influencia de una depresión aislada en niveles altos (DANA),
la cual provocó algunos fenómenos de lluvias intensas sobre
las islas. Posteriormente, al tiempo que el núcleo principal de
la DANA se desplazó hacia el nordeste, una nueva perturbación
se descolgó y se sitúo al suroeste de las islas. La situación
se muestra gráficamente en la figura de la derecha.
En ella aparecen el geopotencial
(m, azul) y la temperatura (C, rojo línea
discontinua) en 500 hPa previstos para el 31/03/2002 a 12:00 UTC por la
pasada del ECMWF del 30/03/2002 a 12:00 UTC (todos los campos que se van
a mostrar en este apartado provienen de esa pasada). Se aprecia
una DANA muy alargada que se extiende desde el suroeste de las Islas Canarias
al nordeste de la isla de Madeira, con dos máximos de vorticidad
bien definidos. Estos máximos de vorticidad están asociados
con sendos núcleos fríos claramente visibles, el del suroeste
con una temperatura mínima de –20°C y el del nordeste de –21°C.
La temperatura sobre la isla de Tenerife en este nivel era de –18°C,
un factor fundamental para el establecimiento de un entorno de marcada
inestabilidad. |