Además
de la ecuación omega, dentro de la teoría cuasigeostrófica
existe una segunda ecuación, muy importante desde el punto de vista
operativo, que es la llamada ecuación de
la tendencia del geopotencial.
En esta ecuación,
la variación local en el tiempo del geopotencial es producto
de la acción de dos términos (ecuación 1):
-
uno proporcional a la advección
de vorticidad absoluta geostrófica por el viento geostrófico
(ecuación 3)
-
y otro llamado advección
diferencial de espesores (ecuación 4).
Para derivar esta ecuación
se parte de las mismas ecuaciones básicas usadas al obtener la ecuación
omega, esto es, la ecuación termodinámica adiabática
y la ecuación de vorticidad cuasigeostrófica, y se elimina
la velocidad vertical cuasigeostrófica entre ellas.
El término del primer
miembro de la ecuación 1 es proporcional a la tendencia de geopotencial
cambiada de signo, siempre que se suponga una variación sinusoidal
para esta tendencia (el mismo argumento que se usó en el estudio
de los distintos términos de la ecuación omega del capítulo
anterior).
Los dos términos que
dan lugar a caídas o aumentos de geopotencial se estudian por separado
en las páginas siguientes. |